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Pablo Pineda

El Campillo C.F. sondea el mercado provincial con la mirada puesta en el ascenso

EL CAMPILLO. Tras dos aciagas temporadas de condena al ostracismo de la Primera Provincial, culminadas por los pupilos de Antonio López Espinosa lejos de los puestos que dan acceso a la disputa de la eliminatoria de ascenso, el Campillo C.F. afronta, de cara al curso 2006-2007, la meta del retorno a Regional Preferente. Para ello, la directiva trabaja en el sondeo del mercado onubense, en busca de la incorporación de un grupo de 7 u 8 futbolistas que refuercen la exigua plantilla de jugadores locales de la que dispone en la actualidad. Una necesidad que se hizo patente después de los apuros que atravesó el técnico, sobre todo, en la última fase del pasado campeonato de Liga para completar una convocatoria con 16 jugadores. 

La lucha por la certificación del objetivo de la vuelta a la máxima categoría del fútbol provincial, en la que el conjunto campillero ostentara el papel de coloso en la década de los 90 y principios del presente siglo, cuenta con otro aliciente para los jugadores, el de la remuneración. Después de dos años sin recibir una retribución económica, la Directiva, presidida este año por María Ángeles Morales García, ha asumido el compromiso de abonar a cada uno de los integrantes del equipo convocados las cantidades de 25 euros por partido ganado fuera de casa, 20 euros por victoria en el Campo Municipal Francisco Valero Rojas, 15 euros cuando se empate lejos del municipio minero y 10 euros cuando la igualada se produzca en el feudo campillero. 

Se trata, por tanto, de un vuelco en la política desarrollada por el club en las dos últimas campañas, en las que se optó por conformar un plantel integrado, de un modo exclusivo, por jugadores del pueblo, lo cual, en su momento, supuso un radical cambio de rumbo en un conjunto que durante muchos años estuvo configurado, en un porcentaje cercano al cien por cien, por deportistas procedentes de la capital y otros puntos de la provincia onubense. Lejos de causar un ambiente de descontento, el nuevo giro ha hallado la aceptación de los futbolistas locales, conscientes de la necesidad de fortalecer el equipo, tanto en términos cuantitativos como cualitativos, para incrementar el nivel competitivo del mismo y poder dar el salto de categoría. 

De momento, a la espera de la llegada de los fichajes y tras sólo dos entrenamientos, el Campillo C.F. cuenta con el saldo de una derrota en el único partido disputado en la presente pretemporada. Cayó por 0-2 ante el Medina Arsena de Aracena en el Campo Municipal Francisco Valero Rojas en el tradicional amistoso de las fiestas de julio de la localidad minera.

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