Aspromin afianza su plantilla en tiempos de crisis con 35 contratos indefinidos

La asociación de protección de personas con discapacidad intelectual, que atiende en sus centros a 133 usuarios, extiende así la estabilidad laboral al 79,4% de su nómina

EL CAMPILLO. La dependencia va camino de convertirse en la principal fuente de riqueza de una comarca deprimida como es la Cuenca Minera de Río Tinto. La Asociación Protectora de Personas con Discapacidad Intelectual, Aspromin, acaba de dar un nuevo argumento de peso a esta afirmación al afianzar su plantilla con la conversión de 35 contratos eventuales en indefinidos. Unas rúbricas con las que sus instalaciones de El Campillo, unidas al recién estrenado Centro de Atención Infantil Temprana en la capital de Huelva, que abrió sus puertas en octubre de 2010 para niños de 0 a 6 años de edad, extienden la estabilidad laboral a un total de 85 trabajadores. Algo que supone el 79,44 por ciento de su nómina, integrada, a día de hoy, por 107 empleados que dan respuesta a las necesidades de formación y rehabilitación de un total de133 usuarios.

La buena nueva, que emerge como un verdadero brote verde de esperanza en la maltrecha economía de una zona que camina azotada por la incertidumbre desde el cierre de la línea del cobre, viene a consolidar a esta entidad sin ánimo de lucro dedicada a la atención integral de discapacitados psíquicos desde 1969 como uno de los motores de la comarca. La satisfacción, las felicitaciones y las manifestaciones de alegría expresadas por los beneficiarios de esos anhelados contratos, así como la envidia sana de los dos millares de desempleados de la Cuenca, no se hicieron esperar en una tierra poco dada en los últimos tiempos a la siembra de un empleo con garantías de perdurar en el tiempo. Las redes sociales echaban humo.

Aspromin, en constante crecimiento desde su fundación, desarrolla su labor desde El Campillo a través de una amplia red de centros concertados con los departamentos de Educación o para la Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía. Así, cuenta con un Centro de Educación Especial (25 plazas), que incluye una unidad de formación profesional en horticultura y jardinería; una Escuela Hogar (19 usuarios), un Centro Ocupacional (35 alumnos), con talleres de cerámica, albañilería o carpintería; y tres residencias, una de adultos (27 usuarios), otra de gravemente afectados (28 pacientes) y una tercera de psicodeficientes (12 plazas ampliadas ahora a 20). El Centro de Atención Infantil Temprana de Huelva, concertado con Salud, ofrece, por su parte, servicios de estimulación, fisioterapia o logopedia a 36 pequeños. El fin, siempre el mismo, el incremento de la calidad de vida y la integración social y laboral de aquellas personas que conviven con la espigada barrera de la discapacidad intelectual.