Montero confirma que el traslado de Urgencias "no supondrá el cierre del servicio"

La consejera insiste en que el motivo del cambio es la ejecución de unas obras de ampliación del centro de salud valorada en 1,5 millones

CUENCA MINERA. La consejera de Salud de la Junta de Andalucía, María Jesús Montero, zanjó en el Parlamento Autonómico la incertidumbre causada entre los habitantes de la Cuenca Minera por el traslado “provisional” del servicio de Urgencias desde el centro de salud de Minas de Riotinto al Hospital Comarcal, situado a escasos metros. Un clima de desconfianza abierto en la zona, en palabras de la diputada andaluza y campillera Susana Rivas Pineda, por las “interpretaciones malintencionadas” de los grupos de la oposición.  La razón del cambio de ubicación, “lejos de cualquier tentativa de cierre definitivo”, es, como expone la consejera, la ejecución de unas obras de ampliación cuyo presupuesto asciende a 1,5 millones de euros. Esta partida, aprobada por el Consejo de Gobierno, desembocará en la incorporación de un nuevo punto de extracciones y tratamientos, un área de educación sanitaria y un gabinete odontológico. Algo que, según recordó Montero, también ha provocado que las consultas diarias se desarrollen en unos módulos prefabricados habilitados para tal fin en unos terrenos cedidos por el Ayuntamiento riotinteño.

Esta medida, como aseveró la titular de Salud, sólo persigue garantizar una atención médica de calidad a los usuarios mediante su liberación de las molestias propias de las tareas de albañilería. Pero aún fue más allá María Jesús Montero, quien no dudó a la hora de afirmar, incluso, que, con esta acción, los ciudadanos van a contar, en un mismo espacio, con los servicios de urgencias de atención primaria y las prestaciones propias de un hospital, tales como la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), medicina interna o cirugía. La consejera también tuvo respuesta para las acusaciones vertidas desde IU sobre presuntos recortes. “Las urgencias que se ofrecen en la Zona Básica de Salud de Minas de Riotinto mantendrán los mismos efectivos”. Similar mensaje lanzó con respecto a las dudas sobre la atención domiciliaria de urgencias, un apartado en el que señaló que El Campillo seguirá atendido por el equipo móvil de Zalamea la Real, mientras que los avisos procedentes de Campofrío, Minas de Riotinto y La Granada de Riotinto serán recibidos, al igual que hasta ahora, por la unidad de Nerva.

Ante las críticas lanzadas tanto desde los profesionales sanitarios, que consideraban una “barbaridad” que las urgencias del centro de salud sean asumidas por el Hospital Comarcal, y desde IU, que denunciaba que los vecinos de Minas de Riotinto se verían obligados a desplazarse hasta Nerva y Zalamea la Real, lo que, a juicio de la coalición, “podría colapsar los centros de estos municipios”, Montero se mostró tajante. Los datos aportados por la máxima responsable andaluza de Salud contabilizan una media de 22 pacientes por día en los servicios de urgencias de Minas de Riotinto, de los cuales, “más del 70 por ciento eran atendidos, hasta el instante del traslado, en el hospital”. Por tanto, “el incremento de la actividad, que viene acompañado de una red de personal de refuerzo, apenas será perceptible en la práctica y, desde luego, no causará estragos ni saturará el centro”. De esta forma, la consejera atajó en la Cámara andaluza un caso que motivó, como consecuencia del mensaje “erróneo” de una oposición que trataba de sacar tajada política y unos profesionales que temían por su futuro, varias protestas ciudadanas a las puertas del Consistorio y de las instalaciones médicas riotinteñas.