El Consejo Socioeconómico presionará para que se acorten los plazos de los desdobles

Los agentes sociales de la Cuenca firman un documento que recoge las tradicionales reivindicaciones de la comarca para su diversificación

CUENCA MINERA. El Consejo para el Desarrollo Socioeconómico de la Cuenca Minera presionará al Ministerio de Fomento y a la Consejería de Obras Públicas y Transportes para que los plazos de ejecución de los desdobles de las carreteras N-435 (San Juan del Puerto-Badajoz) y A-461 (El Campillo-Santa Olalla del Cala) sean acortados lo máximo que permitan los ineludibles trámites burocráticos. Así lo acordaron los agentes políticos, sindicales y empresariales de la comarca, que, el pasado martes, firmaron un documento en el que, además, se cataloga como “de interés estratégico” la localización del suelo necesario para la instalación del anhelado Parque Empresarial en la zona de conexión de las dos futuras autovías. Las demandas incluyen también la apuesta por la instalación de micropolígonos industriales en cada uno de los municipios mineros, debido a su efectividad para atraer pequeñas y medianas actividades económicas e impulsar la cultura emprendedora en una tierra que huye del monocultivo del cobre. La Mancomunidad tiene un periodo de dos meses para presentar una propuesta que recoja los posibles emplazamientos para cada una de estas infraestructuras.

Una de las novedades en esta iniciativa que pone de nuevo sobre la mesa las tradicionales reivindicaciones manifestadas por la Cuenca desde el inicio de la decadencia de la minería, en la década de los ochenta, es la intención de constituir una oficina técnica para el desarrollo de un Programa de Captación de Proyectos de Inversión. Esta pretensión, que ya asomó, aunque de un modo tímido, durante el mandato del ex alcalde de Minas de Riotinto, el socialista José Manuel Delgado, al frente del ente supramunicipal (2003-2007), viene ahora acompañada de una petición de apoyo financiero a la Junta de Andalucía por un tiempo de cuatro años. Los alcaldes, los portavoces de los grupos políticos de la Mancomunidad, UGT, CC OO y la Federación Onubense de Empresarios (FOE) se han marcado un espacio de sesenta días para consensuar y nutrir este reclamo de argumentos sólidos. La meta es convencer a la Administración autonómica para que destine partidas a ese departamento que, en teoría, estaría integrado por expertos en atraer riqueza y empleo.

De igual modo, vuelve al escenario de las urgencias de la comarca el “esencial” Centro de Innovación Tecnológica para el sector del plástico, con la mirada puesta en la consolidación de sociedades como Río Tinto Plásticos, Tubespa o Nature Pack. Su ubicación, el ansiado macropolígono industrial. Pero tampoco se olvidan los agentes sociales de la historia metalúrgica de la zona. Apoyan el proyecto de la reapertura de la línea del cobre, aunque, como ya están cansados de repetir, bajo la dirección de compañías serias y solventes, así como avalado por las más estrictas garantías sociolaborales y medioambientales. Viabilidad, éste es el requisito indispensable. Y es que, en el ambiente, pesa el temor a recaer en los errores del pasado y en las garras de presuntos intereses especuladores. Por el cumplimiento de estos ambiciosos compromisos velará una Comisión de Seguimiento que estará formada por dos representantes de cada una de las organizaciones que suscriben un tratado que, según las declaraciones del presidente de la Mancomunidad, Vicente Zarza (PSOE), el secretario general de la FOE, Rafael Ávila, y los líderes provinciales de UGT y CC OO, Jorge Puente y José Delgado, “sienta las bases del despertar definitivo de la Cuenca Minera”.