Berrocal reprocha a Medio Ambiente no haber cumplido todos sus compromisos

Los vecinos lamentan que se han perdido jornales ante la ausencia de aportaciones de corcho suficientes por parte de la Junta

BERROCAL. El municipio de Berrocal, el más afectado por aquel trágico incendio que hace ahora cinco años arrasó 35.291 hectáreas de las provincias de Huelva y Sevilla y costó la vida a dos vecinos de la aldea zalameña de Las Delgadas, afronta este aniversario con un sentimiento “agridulce”, según explicó su alcalde, el socialista Juan Jesús Bermejo. Las llamas afectaron en torno a la mitad de la superficie de masa forestal del término municipal berrocaleño y minó, por tanto, la producción de sus alcornocales, lo cual derivó en una merma insalvable para el motor de la economía local: el sector del corcho. Ahora los vecinos, bajo las palabras del regidor, aunque celebran el cumplimiento de los compromisos adquiridos en su momento por las consejerías de Agricultura y Pesca, Empleo y Obras Públicas de la Junta de Andalucía, así como por la Diputación Provincial de Huelva, lamentan que el departamento de Medio Ambiente no haya aportado a la cooperativa las partidas de corcho necesarias para compensar las pérdidas ocasionadas por el fuego.

Distinto es el caso de la eliminación de árboles muertos y eucaliptos (una especie no autóctona) de las fincas quemadas. Esta actuación sí es valorada de manera positiva por el pueblo berrocaleño, en el marco de su apuesta por la declaración del término como paisaje protegido. Sin embargo, el descontento por la gestión de la cartera que ahora dirige la onubense Cinta Castillo y que en el instante del incendio estaba en manos de la actual presidenta del Parlamento de Andalucía, Fuensanta Coves, vuelve a aparecer cuando se mencionan otros aspectos. Los ciudadanos critican una “falta de información” y perciben que “las inversiones no dan los frutos deseados”. Algo que achacan a que los trabajos ejecutados, lejos de atender las demandas de los propietarios, “han sido impuestos de manera unilateral por la Administración autonómica, sin escuchar nuestras opiniones e inquietudes”. Como expresa Juan Jesús Bermejo, los vecinos también han trasladado al Ayuntamiento el descontento por la ausencia de unos criterios similares a la hora de emprender la acciones de recuperación de la zona, lo que se traduce en un clima de “agravios comparativos”.