PA y PP vetan el Plan socialista de Empleo y Vivienda y la figura del Concejal nº 12
Consideran inviable o innecesaria las iniciativas con las que el PSOE quería ofrecer un puesto de trabajo a las familias que agoten el paro e impulsar la participación ciudadana en los plenos
EL CAMPILLO. PA y PP han votado por dos veces en contra de las mociones presentadas por el Grupo Socialista para que, por un lado, el Ayuntamiento de El Campillo pusiera en marcha un Plan de Empleo y Vivienda que contribuyera a aliviar el sufrimiento de las familias que padecen con mayor virulencia la embestida de la crisis, las que han agotado la prestación por desempleo; y, por otro, impulsara la participación ciudadana mediante la creación del Concejal Número 12. Las dos fuerzas conservadoras que, en alianza, gobiernan el Consistorio minero han dado así, a juicio del PSOE, un “portazo” a dos medidas de claro tinte social y de calidad democrática que “tan sólo podrían redundar en mayores tasas de bienestar y desarrollo del pueblo”.
El primer “no” se produjo en el Pleno ordinario del 7 de diciembre, cuando andalucistas y populares no aceptaron someter las propuestas socialistas a debate. Y el segundo, en la sesión extraordinaria celebrada, a instancias de los cinco ediles de la oposición, el 22 de diciembre (a las 8:30 horas de la mañana). La primera vez, el portavoz de los nacionalistas, José Manuel Rodríguez, alegó que no habían sido registradas en tiempo y forma (las mociones de urgencia pueden presentarse en el mismo pleno y el PSOE lo hizo con más de 48 horas hábiles de antelación). Y en la segunda ocasión, el equipo de Gobierno se pronunciaba en contra de un modo ya directo para, como aseveran desde las filas socialistas, “dejar en la estacada a los más débiles y a los jóvenes que quieren ver cubierto su derecho a una vivienda digna y a las asociaciones y personas que anhelaban tener una participación activa en la vida política municipal”.
Plan Social de Empleo y Vivienda
El Plan Social de Empleo y Vivienda planteado desde el Grupo Socialista contemplaba la oferta de un contrato de trabajo eventual de entre 3 y 4 meses para alguno de los miembros de aquellos hogares que agoten la ayuda del paro y la posibilidad, en el caso de familias con escasos recursos, de conmutar el pago de tasas o deudas contraídas con el Ayuntamiento por servicios a la comunidad. Una opción, esta última, que, lejos de suponer un enorme esfuerzo para las arcas consistoriales, “puede ser asumida sin excesivos problemas”, ya que, “a la misma vez que se renuncia a una serie de ingresos se gana un capital humano de gran valor” para mejorar o ampliar los servicios a la ciudadanía.
A esas dos medidas se sumaba la constitución de una figura similar a la de una Empresa Municipal de la Vivienda para la ejecución, con mano de obra local, de las 80 VPO que está en disposición de albergar el suelo urbanizado para tales fines por el anterior Gobierno socialista, “siempre de un modo progresivo”, en consonancia con los datos del Registro Municipal de Demandantes de una Vivienda creado en el mandato 2007-2011, y la elaboración de un Inventario de Viviendas Vacías de El Campillo para, desde la colaboración público-privada, fomentar el alquiler, en especial, entre la población joven para favorecer la emancipación.
La primera teniente de alcalde, Manuela Caro (PP), basó la negativa a esta iniciativa en que la “delicada situación” de las arcas del Ayuntamiento la hacían inviable. Algo a lo que añadieron desde la bancada andalucista que la experiencia de otras localidades que ya habían apostado por la constitución de empresas públicas de vivienda contrastaba su carácter deficitario. La portavoz del PSOE, Susana Rivas, admitió, en este sentido, que, desde luego, no es ninguna tarea fácil y que la crisis afecta de un modo especial a la acción de las corporaciones locales, pero que se trata de establecer prioridades a la hora de decidir el destino que se le da a los recursos (en clara alusión, por ejemplo, al salario del alcalde). Los socialistas lamentaron, además, que “ni siquiera se hayan querido sentar con nosotros para que les explicáramos de qué manera se podían aplicar tales medidas sin comprometer la sostenibilidad de las cuentas municipales”.
Concejal Numero 12
El Concejal Número 12 de El Campillo, por su parte, como aseveraron desde el PSOE, no es más que un instrumento dirigido al fomento de una democracia participativa real y efectiva que abre a la ciudadanía la posibilidad de presentar mociones y formular ruegos y preguntas al Pleno. En el primer supuesto, la iniciativa elevada por los socialistas estipulaba que cualquier asociación local o grupo de vecinos, previa recogida de 100 firmas de apoyo, pudiera proponer un proyecto a la Corporación municipal y defenderlo en la sesión plenaria a través de un portavoz elegido por ellos mismos. Y en el caso de los ruegos y preguntas, se trata de que todo campillero, tras registrarlo en el Ayuntamiento con tres días hábiles de antelación, pueda manifestar su inquietud por alguna situación o hacer alguna consulta directa y pública al alcalde o a un concejal con competencias en la materia.
PA y PP expusieron que ya hay bastantes canales que garantizan la participación vecinal y, mediante las palabras del alcalde, el andalucista Francisco Javier Cuaresma, que sólo aceptarán esta figura cuando la Ley obligue a ello (y es que, según defendió Susana Rivas, es algo que ya se tramita en el Parlamento de Andalucía). La popular Manuela Caro subrayó, además, que la transparencia y la colaboración con las asociaciones es máxima, así como que la atención a las demandas de la ciudadanía es inmediata, “sin citas previas”, para concluir que el equipo de Gobierno no cesa en su empeño por fomentar la participación. Los socialistas, en cambio, contestaron que convocar plenos a horas intempestivas (las dos últimas sesiones se han celebrado a las 8:30 horas), “para que no acuda público”, y la no publicación de las actas de las juntas de gobierno y los propios plenos en la web del Ayuntamiento, “para que el pueblo no conozca las decisiones que se toman”, precisamente, “no van hacia ese camino”.
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